ALERGIAS

Las abundantes lluvias caídas durante el otoño e invierno y sobre todo en marzo, provocarán, según los expertos en alergología, un aumento extraordinario del polen presente en el aire. Para las personas que sufren esta dolencia, va a ser un año de alto riesgo, dicen los especialistas en el tratamiento de alergias y asma. La gran mayoría son alérgicos al polen de las gramíneas que además es el más agresivo con las vías respiratorias. Este tipo de granos proceden de los cereales, de las plantas silvestres, la maleza que crece en las cunetas de los caminos, parques o descampados.

En las próximas semanas según las previsiones, aumentarán las temperaturas y comenzará la floración de toda esa capa vegetal, en mayo empieza la polinización, y será cuando más incidencia tenga las alergias, que se podría agravar si el tiempo es demasiado seco, ya que la falta de humedad favorece la dispersión de los granos.

Además de las gramíneas, hay otras clases de plantas que podrían hacer la vida imposible a los alérgicos. Principalmente el polen de los “plátanos” (nada que ver con el comestible), un árbol de sombra frecuente en las calles y paseos, el olivo, cuyo periodo de polinización coincide con el de las gramíneas y el de las “quenopodiáceas”, una clase de maleza, parecida a la espinaca y la acelga. Los que se han librado este año de las alergias, son las personas sensibles a las “cupresáceas”, arizónicas y cipreses, estas plantas polinizan entre enero y marzo, sus efectos han sido suaves al coincidir con tiempo húmedo.    

El sistema inmunitario normalmente protege al cuerpo de sustancias nocivas como las bacterias y los virus. A veces este sistema también reacciona ante sustancias extrañas, llamadas alérgenos, Cuando un alérgeno penetra en el organismo de un sujeto que es alérgico a él, su sistema inmunitario responde produciendo una gran cantidad de anticuerpos  

Las alergias pueden llevar a que empeoren ciertas afecciones, como los problemas de sinusitis, los eccemas y el asma. Con frecuencia, los alérgenos que se inhalan, producen congestión nasal, picazón en garganta y nariz, producción de moco, tos o sibilancias. Los alérgenos que entran en contacto con los ojos pueden provocar ojos pruriginosos, llorosos, rojos e hinchados.

Pero ¿cómo evitar el contacto con el polen?

Estos son algunos trucos para sobrellevar la alergia esta primavera. Eso sí, en este caso, la rutina es muy importante:

- ponerse gafas de sol al salir a la calle
- evitar zonas de abundante vegetación
- mantener las ventanas cerradas por la noche o utilizar aire acondicionado con filtros
- ventilar la casa, el mejor momento será o bien a primera hora de la mañana o bien por la noche
- disminuir las actividades al aire libre durante las 5-10 de la mañana y de 7-10 de la noche, que es cuando se concentra mayor cantidad de polen en la atmósfera
- mantener cerradas las ventanillas cuando se viaja en coche
- en los días en que la concentración de pólenes es mayor, como en días secos y de viento, permanecer el mayor tiempo posible en casa
- no secar la ropa en el exterior en esos días
- llevar siempre encima la medicación de rescate que te haya recetado el médico
- en vacaciones elegir destinos libres de polen como por ejemplo, la paya
- evitar tumbarse en el césped
- lavarse el pelo por las noches, para eliminar la posible acumulación durante el día
- eliminar el polvo de la casa, preferiblemente con un paño y una mopa húmeda.