miércoles, 21 de agosto de 2013

LA DIFÍCIL CONVIVENCIA Y LA AGRADABLE COMPAÑÍA.



Es un bonito y bien cuidado parque con mucha arboleda, amplias zonas con césped, un arroyo artificial que desemboca en un estanque donde chapotean algunos patos, bancos para el descanso y sombra. En este apacible lugar suelen coincidir a menudo dos parejas que se han conocido hace poco, pues acostumbran a pasar parte de las mañanas en este agradable entorno. Una de las parejas está compuesta por Linda, de unos sesenta años, que haciendo honor a su nombre, es una mujer de buen presencia y atractiva, va acompañada por Alejandro. La otra pareja él, Paco de unos setenta “bien llevados” y de porte agradable, junto a él Javier. Alejandro y Javi son amigos, pasan las mañanas juntos y son incansables, algo normal a su edad, uno siete y el otro acho años, juegan al futbol, corren saltan se columpian, suben y baja por el tobogán y, a veces persiguen a los patos. Mientras los abuelos Linda y Paco, charla pausada y tranquilamente de diversos temas incluido el tiempo, tema recurrente donde los haya para rellenar espacios o intercalar entre temas difíciles o ásperos, como el caso que inicia Linda, el de la convivencia, ella comienza la conversación diciendo que su marido recientemente se había jubilado y que si antes, como en casi todos los matrimonios, había alguna discusión ahora al estar todo el día en casa el ambiente es insoportable, a él le había cambiado el carácter para mal al no encajar la nueva situación, pagándolo con ella de tal manera que son continuas las discusiones desbocando en situaciones críticas, debido a ello está pensando seriamente en tomar alguna decisión y, concluye exclamando en un ahogado grito entre dolor y rabia ¡porque a veces es tan difícil la convivencia! hace una pausa y calla.
Si hay algo que sabe hacer Paco, es escuchar, y en esos momentos lo mejor es dejar que hablen los sonidos del ambiente, el ruido del agua que produce el surtidor del estanque, el piar de los gorriones entre las ramas de los árboles y las risas de los dos niños, estas pausas y silencios contienen más compresión  y entendimiento que muchas palabras, si se comparte en agradable compañía.

17 comentarios:

  1. Claro, en un escenario como ese, merece la pena contemplarlo en silencio, escuchar los ruiditos de los animalillos, o el silencio natural, es posible que eso ayude a llevar mejor las cosas, eso espero... :))
    Salud

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  2. El ejercer de abuelos hace que pueda llegar a estas situaciones, un parque tranquilo, un estanque relajante, buena sombra y un par de niños que juegan solos, por otra parte los abuelos unidos por esos nietos que son amigos y surge la conversación, la amistad, las confidencias , la escucha,claro que todo esto se acentúa al estar en un lugar tan idílico y ser solamnete un par de horas al día.La convivencia en casa es diferente pues hay que estar todas las horas del día con esa persona que compartes tu vida y el lugar no es tan idílico....claro que poniendo buena voluntad por ambas partes se puede lograr una buena convivencia y hacer del hogar un lugar indispensable y muy agradable.Saludos

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  3. Nos planteas un tema de mucha actualidad y que bien merece que tomemos en cuenta los síntomas ajenos como alerta de nosotros mismos. Muchas parejas viven bajo un mismo techo, pero no bajo un verdadero compartir, de ahí que que la jubilación sea la espoleta de futuras discusiones; por todo ello, un oído que se presta a escuchar sea un gran consuelo para quien carga con esa pesadumbre. Por otra parte,verse forzada a llevar al nieto al parque y allí encontrar un cierto consuelo es un mero y propicio azar.
    Un abrazo.

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  4. Iniciar los nuevos ciclos de conviviencia cuando las circunstancias cambian, a veces crea serias crisis en las parejas. He visto gritarse en pleno restaurante por la elección entre limonada o refresco a las parejas mejor avenidas, en el proceso post jubilación. No es fácil... Y cuando los nietos no conviven con los abuelos lo suficiente, se crea un vacío de conversación, porque hay que abordar temas que ambos no desean abordar... tales como: Cómo te sientes?
    Me gusta, como a Genín, la parte de quien se centra en disfrutar de ese sitio maravilloso en que sitúas la historia que nos cuentas.
    Besos!

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  5. Cuando se llega a cierta edad, como la pareja en cuestión, suele aparecer el aburrimiento, si no se sabe llevar bien.

    Hay que inventar unos paseos, una convesración que no sea "¿como estás hoy?", y hablar de cosas agradables . como recordar vivencias de antaño, o de películas que nos gustaban...Hay muchas cosas para pasarlo bien, y entenderse.
    Besos
    Leonor

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  6. Paco, sabe hacer algo que no todas las personas tienen la virtud de realizar, callar y no dar consejos, soluciones, preguntas etc. ; ella necesita desahogarse sin más, y Paco le ofrece escuchar los sonidos de la vida, de la naturaleza, de la calma a ver si esa calma entrará en ella y supiera al menos disfrutar ese momento.
    Tiempo habrá para analizar, asimilar, comprender. Mi amiga necesita sentirse oída y yo soy especialista en eso, me hice a la fuerza, llevo años de práctica.

    Tu relato según lo percibo, es un homenaje al buen oyente, dentro de un escenario donde pudiera pasar desapercibido.

    Enhorabuena, por llegar más allá.


    Besos muchos ♥♥♥

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  7. Es difícil la convivencia, por supuesto, pero si existen unas vivencias compartidas todo se supera. A menudo el problema estriba en que hay personas que durante su vida solamente han sabido trabajar, no han cultivado ninguna afición u ocupación, y cuando llega la hora de la jubilación se les trunca la vida. Entre otras razones, por esto es tan importante lo que hacemos nosotros: mantener nuestros blogs abiertos, algo que nos tiene sumamente entretenidos. Un abrazo desde mi mejana

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  8. En estas situaciones lo mejor es tratar de no opinar y menos aún aconsejar, porque con el tiempo es muy probable que la convivencia vuelva a ser una balsa de aceite recordando los buenos momentos vividos por ellos.

    Saludos

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  9. José: me he parado a leer los comentarios. Me quedo con cosas de todos. Antes de leerlos pensaba lo que te iba a comentar y me encuentro con el comentario de Felipe Tajafuerte :Los blogs. Es una gran vía de escape que algunos tenemos la suerte de vivir y llevarlos a cabo, A veces, con los años, necesitamos recuperar aquellas historias que antes no tuvimos tiempo de hacer y, por desgracia, nos damos cuenta que quien o quienes conviven con nosotros, o no tienen esa necesidad o tienen otro tipo de ellas que son incompatibles en gustos y surgen choques...Por ello es necesario y difícil, encontrar quien escuche...Por eso llega tanto a nosotros este escrito...Es un tema muy, muy duro el cual suavizas con un paisaje precioso y el reflejo de la inocencia en los niños...
    Muy bien, José. Un placer " escucharte"...y gracias por escucharme tú.
    Un abrazo.

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  10. La vida nos pone, a veces, en situaciones difíciles, pero debemos empeñarnos en buscar la solución más apropiada para cada caso, el diálogo es importante.

    Un abrazo.

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  11. ¡Estas pletórico, me enamoran tus letras José!

    ¡Que tengas un agradable fin de semana!

    Un cálido abrazo querido amigo.

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  12. Incluso se dice que en los matrimonios de trabajadores, después de las vacaciones se incrementan las demandas de divorcio, fruto de la convivencia real, que se les ha negado el resto del año. Evidentemente, como ya han comentado, la jubilación es un cambio tan notable de convivencia, que es muy delicado, y que necesita una adaptación. Pasados casi dos años de mi experiencia, estoy contento con el planteamiento que me hice, y que cuento en mis 90 dias de jubilado. Desde luego hay que plantearlo mutuamente con todo cariño, y volviendo a planear ilusiones conjuntas, respetando nuestros tiempos propios. Mi esposa sigue saliendo con sus amigas, a tomar café, cenar, de cuando en cuando, lo mismo que yo. El que la convivencia sea un infierno o un cielo es cosa de los dos.
    Y os garantizo que la mia es excelente y la disfrutamos a tope.

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  13. No nos dio tiempo despues de 47 años de matrimonio de llegar a esa convivencia.
    Como ya sabes se me fue antes de llegar a ello.

    Muy bien expresado tu escrito.

    manolo

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  14. Verdad es que elegir un amor para toda la vida es una lotería, yo he tenido la suerte de encontrarle, y después de una larga vida con algunos contratiempos como todos, seguimos queriéndonos más que al principio cuando estábamos solos, y los hijos aun no habían llegado a nuestra vida.
    La jubilación no tiene porque alterar esas cosas que antes justaban, salir solos con amigos yo lo veo conveniente, en ambos casos, nadie es propiedad de nadie, y después de una larga vida de trabajo, la recompensa es el ocio, y lo que antes no hemos podido hacer. Un escrito interesante para empezar a plantearse ciertas cosas. Un abrazo.

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  15. Que entorno tan fresco y agradable, invita a pasear con una compañia que lo realce aun mas.un abrazo

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  16. Hola José:
    El parque, la agradable mañana y el tranquilo entorno, invita a estos lindos abuelos a compartir sus vivencias y a acompañarse en este caminar, que a veces puede hacerse dificil si vas solo por la vida.
    Me ha encantado como escribes este relato que dejas inconcluso, te quedas esperando el final de la historia.Espero que sea un final feliz.
    Mis cariñosos saludos, amigo.

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  17. Muy buena entrada José, esta conversación creo que se da mucha veces, pero no en un entorno tan bello.
    Un beso.

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